CAMBIA TU CRISIS POR ABUNDANCIA 1

Cuando todo pareciera irrecuperable. Cuando la escasés esté llamando a tu puerta. Cuando la crisis está en su pico máximo. Llegó a nivel bastante elevado y no haya en apariencia una mejoría. Dios nuestro Padre Celestial nos tiene una buena noticia, los bancos celestiales no han quebrado ni quebrarán jamás. Que tus recursos no son el oro, el petróleo, el euro, u otro objeto de valor, tu fuente es Dios. El dijo: “Mía es la plata, mío es el oro, dice Jehová de los Ejércitos. Hageo 2.8. Sigue diciendo Dios a través de su Profeta Habacuc, “Aunque la higuera no florezca, ni en las vides haya frutos, aunque falte el producto del olivo, y los labrados no den mantenimiento, y las ovejas sean quitadas de la majada, y no haya vacas en los corrales; con todo, yo me alegraré en Jehová, y me gozaré en el Dios de mi salvación. Jehová el Señor es mi fortaleza, el cual hace mis pies como de ciervas, y en mis alturas me hace andar. Habacuc 3. 17-19.
Siempre hubo crisis, en el mundo. Ésta no es la primera vez. Quiero decirte de parte de Dios, que dejó un antídoto, un remedio, eficaz, su Palabra. Su promesa, sobre la humanidad, su creación. Tu actitud determinará tu estado económico y emocional. Sólo debes estar contento, alegre, gozándote en Dios. Porque tienes la salvación de tu alma. Tienes a Jesús como tu hermano mayor. Al Espíritu Santo que viene a consolar tu vida. Un Gran Padre Todopoderoso que hizo los cielos y la tierra, el Universo en sí, todo lo que puedas ver, todo lo invisible, y su origen es eterno. Alfa y Omega, sin principio ni fin.

Por eso alégrate, no estás solo en esta tierra. Gózate al saber que el Señor es tu Pastor, que nada te faltará. Toma en serio estas palabras, deja que el Espíritu Santo te revele esta gran verdad en tu vida. Renueva tu mente con las promesas de Dios, que está en la Biblia, tu Testamento Personal que Dios dejó sólo para ti. Así debes pensar, pues, teniendo este ánimo, comprenderás que Dios es tu escudo. Tus pies serán como de ciervas, que sólo en las alturas estarás viviendo. Qué significa estas palabras, estarás en las montañas de tu Padre Celestial. Estarás cerca de Él, tu fuente, serás saciado y nada te faltará. Por eso, el Rey David dijo estas palabras: “No he visto justo desamparado ni su descendencia que mendigue pan".

Entonces que debes hacer, festejar el triunfo de Cristo en la Cruz del Calvario. Debes desatar abundancia dentro de tu hogar. Proclamar las promesas de Dios sobre tu familia. Cómo lo hago esto, sencillo, no te compliques, cada Cumpleaños de tus hijos siempre hay un dinerito extra. Siempre uno trata de hacer ese día lo mejor. La mejor comida, comprar la gaseosa o soda, comprar una torta o pastel e invitar a los amigos para luego participar de la fiesta. Aquí me detengo un poco para contarte un secreto de la Biblia. Eliseo fue a Gilgal, había mucha hambre en ese lugar. Llegó y lo primero que hizo. Dijo, todo el mundo vamos a comer. Cocinó para muchos. El diablo quiso entristecer la fiesta, poniendo muerte en la olla. El Profeta dijo: no se preocupen, esparció harina sobre la olla que es simbolismo del Espíritu Santo y continuaron comiendo. Luego vino un hombre de Baal-salisa trayendo provisiones y dijo el Profeta, que se reparta esta provisión en este lugar y agregó estas palabras, no faltará nada a nadie. Esta historia la puedes leer en 2 de Reyes 4. 38 - 44.

Cuál es la revelación de esta Palabra, debes enfrentar tu realidad. Hay escasés, hay crisis. Enfrentarlo haciendo una gran fiesta en tu casa. Desata abundancia en tu casa, con los tuyos, con tus amigos, como si fuera un cumpleaños familiar. No importa que alguien te diga, eso es una locura, no estás bien de la cabeza. Aun puedes tú también no entender esto que te estoy explicando pero hazlo igual. Ésa será tu prueba. Porque no falta alguien usado por el infierno que diga algo, pero el Espíritu Santo, traerá paz en tu corazón y traerá gozo a tu vida. Habrá una seguridad para tu vida, te sentirás feliz, porque tu provisión está en camino. Hay regalos que Dios te está enviando, pero antes que recibas, dale la bienvenida con una actitud de gozo, obediencia, y sumisión total a Dios el Todopoderoso.

Si todavía no tienes a Jesús en tu corazón, ésta es tu oportunidad. Repite esta Oración diciendo: Jesús quiero ser parte de tu reino eterno. Invoco tu nombre en mi vida. Te acepto como mi Senor y Salvador personal. Perdona todos mis pecados. Ayúdame a servirte hoy, mañana y siempre. Anota mi nombre en el Libro de la Vida. Amén. Te dejo un mail. Cuéntame tu decisión mrestauaracionyvida@Gmail.com Vamos a estar orando por ti.
DIOS SEA PROPICIO PARA TU VIDA Y CONSUELE TU CORAZÓN SIEMPRE.