AL CAMBIAR TU MENTALIDAD CAMBIA TU VIDA

Si en algo Dios trabaja todos los días en el ser humano es que tenga una mentalidad cambiada. Cuando fuimos infantes hemos escuchado muchas palabras negativas y por ende nuestra mente está siempre sujeta a que piense calamidades. Tenemos un sentido de persecución constante y siempre un pensamiento negativo de nosotros mismos. Que no podemos hacer nada, porque somos la oveja negra de la familia. Que somos los incapaces y que nunca podemos hacer nada productivo. Mucha gente tiene el concepto de sí mismo como que es un bueno para nada.
Quiero dar una solución a este problema que aqueja a miles de personas en el mundo entero. La Palabra de Dios nos dice: No tomen como modelo a este mundo. Por el contrario, transfórmense interiormente renovando su mentalidad, a fin de que puedan discernir cuál es la voluntad de Dios: lo que es bueno, lo que le agrada, lo perfecto. Romanos 12.2 (Versión BPD) Qué es lo que nuestro Dios quiere que hagas, que tus pensamientos lo cambies constantemente. Que seas capaz de desechar lo negativo de tu mente que te trastorna y no deja que te realices como ser humano con derecho a prosperar y ser feliz, emprendedor. En otras palabras, una persona exitosa.
Si no renuevas tus pensamientos es como una habitación en donde los muebles están en el mismo lugar. Jamás se lo cambia, ni siquiera para limpiar. Está viejo, feo y lleno de polvo. En otras palabras, tienes tu mente pensando lo mismo de siempre. No hay cambio que genera vida y todo se vuelve rutinario. La gente te conocerá por una persona que nunca tiene nada nuevo. Siempre estás en la misma posición sin ningún cambio radical.
Comienza a determinar que Tú eres un campeón. Tienes cualidades que nadie posee. Eres una persona muy inteligente, sagaz, intrépido, que puede resolver cualquier clase de problema. Esta historia me contaron, ocurrió en los Estados Unidos de Norteamérica. En una Universidad de este país, había un Profesor que necesitaba una persona como Ayudante de Cátedra. Dijo en su clase que tendrían un examen. El que tuviera la mejor nota, sería la persona a quién le enseñaría todo lo que conocía. Además recibiría una beca para toda la carrera. Dando esta explicación dio los temas y la fecha del examen.
Había un Joven que soñaba ser Ayudante de Cátedra. Se puso muy feliz. Se metió a estudiar sin parar, tanto que no salía para nada de su habitación, porque su meta era tener la mejor calificación para obtener su sueño. Tan concentrado estaba que no se dio cuenta era la fecha del examen y que estaba ya retrasado. Llego tarde a la clase. Trata de explicar el porqué de su llegada tardía y el Profesor le dice que vaya, tome su asiento y rinda, porque en una hora más se acaba el horario del examen. Resignado el Joven se sienta y rinde su examen.
Llega el tiempo, este Joven pide diez minutos y el Profesor le dice que no hay mas tiempo. Dice el Hombre: -Mañana se conocerá quién es la persona que será el Ayudante de Cátedra. Al día siguiente todos estaban en la clase y el nombre de este Joven era Eliel. El Profesor lo llama y dice: - Mi Ayudante de Cátedra es Eliel. El Joven se levanta y trata de explicar porqué llegó tarde e interrumpe su Profesor, lo calla y le dice.
-Llegaste tarde y no escuchaste las indicaciones que di a tus compañeros. En la pizarra a mi izquierda había cálculo matemático que no tenía solución y en la derecha había problema que sí tenía solución.
-Tú resolviste los tres de la derecha y luego resolviste dos de la izquierda que no tenía solución, por eso eres mi Ayudante de Cátedra.
Por eso mis amados, dile a tus paradigmas personales, llegué tarde a tu clase. Diablo, no voy a escuchar tus consejos sobre mi persona. Rechazo todo lo que quieras decir de mí, me rebelo desde este momento y jamás te haré caso. Porque renuncio a todos los paradigmas de mi vida. Ya no soy la oveja negra de la familia. Ya no soy el torpe que decía que era. Soy una persona que salgo para adelante y no miraré atrás. No tengo pasado ni presente, solo tengo futuro con Dios y soy un campeón. Nací para vencer, nací con un propósito de Dios en mi vida y cumpliré con los designios de Dios para mi.
Tal vez Tú que estás leyendo este mensaje no tienes todavía a Jesús en tu vida. Te invito que hagas esta Oración de Fe diciendo: Amado Jesús, quiero aceptarte como mi Señor y Salvador personal. Perdóname todos mis pecados e invoco tu Nombre sobre mi vida. Creo que ahora soy salvo. Anota mi nombre en el Libro de la Vida. Amén. Te dejo mi mail para que te puedas poner en contacto conmigo mrestauracionyvida@Gmail.com Oraremos por tu vida para que todo te salga bien.
QUE TENGAS UN FELIZ DIA CON CRSITO JESUS EN TU VIDA.