DIOS SUPLIRA TODAS TUS NECESIDADES
A quién no le gustaría que todas sus necesidades sean cubiertas y la capacidad adquisitiva tenga unos ceros demás?. Quiero decirte que nuestro Padre Celestial nos quiere dar nuestro sueldo mensual, pero, para eso debemos comprender cómo funciona el Reino de los Cielos. Nosotros hemos y seguimos viviendo bajo el Reino de las Tinieblas. Debemos reconocer que hay dos Reinos, el Reino de las Tinieblas que ya fue derrotado en la Cruz del Calvario y el otro, es el Reino de los Cielos que vino Jesús a enseñarnos.
El primer principio es Dar. Dando se Recibe. "Dad y se os dará, medida buena, remecida darán en vuestro regazo", todo esto está escrito y debemos tenerlo en mente porque desarrollaremos con la ayuda del Señor un pasaje donde se nos explica qué debemos hacer para vivir en la plenitud del Señor en nuestra vida.
Isaías 41.10 dice: “No temas, porque Yo estoy contigo; no desmayes, porque Yo Soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia” Ya en la promesa, Dios nos está dando mucha seguridad. No temas. En la Biblia hay 366 veces esta palabra y es para cada día del calendario. Uno tiene para el año bisiesto. Una vez más Dios nos asegura que está con nosotros. No debemos desmayar porque El está en control de todas las cosas. No nos dejará ni mucho menos nos desamparará. Esto ha dejado claro para que nosotros tengamos seguridad. Ahora me quiero concentrar en la palabra “sustentar”, pues allí está la revelación de Dios para nosotros. .Existe una gran diferencia entre sostener y sustentar. Cuando comenzamos nuestra vida en Cristo Jesús vivimos sostenido de la mano del Señor. El Salmista decía en varios Salmos: Tu poder nos ha sostenido. Eso significa que nosotros estamos sostenidos por El en sus manos. Es como una criatura que está comenzando a caminar y de la misma manera, Dios hace con nosotros. El nos sostiene de nuestra mano para que no tropecemos y no nos caigamos. El diablo menciona a Jesús cuando fue tentado “a sus ángeles mandará para que tu pie no tropiece en piedra”, lo cual significa sostener. Ahora esto sucede cuando nosotros aun somos bebés espirituales. Después vamos creciendo con el tiempo, pero aun vivimos sostenido de la mano de Dios. Llega el tiempo en que debemos dejar esta postura con Dios para ser sustentado por El. Ahora que es esto, la palabra sustentar significa apoyar, dar espacio, nutrir, dar lo necesario para que se pueda desarrollar por sí solo. Para que podamos entender mejor, es así: Cuando vivimos sostenidos por Dios, estamos colgados de la mano de El. Estamos limitados en nuestras bendiciones, pero cuando somos sustentados, las cosas cambian radicalmente. Estamos en Dios pero El nos suelta de la mano y nos sustenta. Es allí, donde crecemos y nos desarrollamos por completo. Es allí, donde Dios nos bendice en gran manera porque El tiene confianza en nosotros, que no le vamos a fallar y no haremos nada para salir de esa posición. Es allí, donde Dios nos deja a nosotros ser sus administradores. Administramos sus bienes, y repartimos despojos y hacemos y obedecemos a Dios en todo tiempo. No somos mezquinos, ayudamos la obra de Dios, no cuestionamos a Dios en nada. Solo estamos allí para recibir órdenes del El y sabemos, que es para bien nuestro y de los demás. Es otra dimensión de vida con Dios. Sabemos, si necesitamos serán suplidas íntegramente nuestras necesidades. Seremos siempre personas caritativas, viendo la necesidad del prójimo y estaremos dispuestos a ayudar en lo que se pueda. La palabra sustentar es estar libre, no estar colgado de Dios. Pero estar en Dios, estamos como flotando en sus manos y así, nosotros estamos seguros y desde allí, El nos nutre supliendo todas nuestras necesidades.
Es maravilloso experimentar esta clase de bendición de parte de Dios y El quiere bendecirnos de esta manera. Tanto Dios y Nosotros estamos seguros. Pidamos al Espíritu Santo que nos ayude, en revelarnos esta gran bendición para nuestras vidas y así, ser de bendición a miles.
Si todavía no tienes a Cristo Jesús en tu corazón, lo puedes tener ahora, repitiendo una sencilla Oración de Fe diciendo; Jesús quiero que seas mi Señor y Salvador personal. Me arrepiento de todos mis pecados y tu sangre ahora, me limpia de todo mal. Amén. Si has hecho esta oración por primera vez en tu vida, te dejo un mail en donde me puedes escribir: mrestauaracionyvida@Gmail.com El ministerio orará por tu vida y por tu familia.
QUE DISFRUTES DE LAS BENDICIONES EN ABUNDANCIA EN DIOS.
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